06 septiembre 2006

Dios salve a la reina...

A manera de homenaje, su primera canción de su primer albúm para el primer grupo del que me declare fan y que me acompaño por largo tiempo. A 60 años del nacimiento de Freddie.




04 septiembre 2006


Viva la Vida, Frida Kahlo, 1954 Posted by Picasa

03 septiembre 2006

Ya sé, ya sé, todas admiramos a Frida

Mi admiración por Frida Kahlo es heredada. A mi madre les gustan mucho sus cuadros, y me dediqué a averiguar el porqué. Con el tiempo me agradaron también.
Más allá de la calidad artística de Frida, su sentido de proporcionalidad, su capacidad de abstracción, la fuerza y detalles de sus pinceladas, lo que más me impresiona es que alguien sin conocerla, ni saber de su vida puede apreciar su amor, dolor y pasión a través de sus cuadros.

Desde temprana edad Frida aprendió a reírse de sí misma y encontrarse, o tal vez, a perderse, en los recovecos de su imaginación, así pudo evadir, aunque sea a ratos el rechazo que sufría “Frida pata de palo” por un defecto físico consecuencia de la poliomielitis.

Amazona de su tiempo y corsaria marxista. Responsable de las canas verdes de su madre por su gusto de vestir de jovenzuelo y experimentar cada día, todos los días. Con una innata capacidad de liderazgo y un carisma especial, era la verdadera cabecilla detrás de “Los Cachuchas”.

Pero su destino estaba trazado y accidentalmente ganamos una artista que ha revolucionado el arte en México, un trágico choque entre un tranvía y un autobús originó una lesión que le acompaño para toda la vida y que le hizo pasar horas y horas postrada en cama; que le desafió, que le encaró con ella misma, que a través de un espejo le enfrentó a sus más grandes miedos: al monstruo que somos nosotros mismos.

Y ahí es donde toda esa sensibilidad de niña, esos juegos de evasión y ese espíritu de lucha salió adelante, empezó a comunicarse a través de los pinceles y a hablar de lo que mejor conocía, de su mundo particular. De sus esperanzas y sueños y eventualmente de su amor, amor hacia la vida, hacia su familia, hacia la naturaleza y hacia Diego.

Realmente no se quién impactó más en quién, si Frida en Diego, o Diego en Frida pero si sé que del encuentro de estas dos fuertes personalidades surgió el amor y el desamor, hubo infidelidades, grandes peleas pero también grandes reconciliaciones y grandes cuadros. Diego fue temática recurrente de Frida, como hijo, como esposo, como pintor, él le mostró nuevos horizontes y la llevaba con ella en sus viajes. A su vez podemos ver en la obra de Diego a Frida como obrera al frente de las masas, Frida en un paseo dominical por la Alameda, o Frida meretriz en pleno Palacio de Gobierno.

Pero más allá de Frida, la artista, con sus calificativos de surrealista y revolucionaria; admiro a Frida mujer, a la estoica, a la que fue factor de cambio, a la que nunca dejó que la esperanza muriera, y fue congruente consigo misma. Aquella que amó la vida hasta el final de sus días.